Córdoba obrera
“El desafío en 2021 será ganarle a la inflación”
Por Miguel Apontes • 01/01/2021 07:00 • Tiempo estimado de lectura: 6 minutos
Lo dijo Héctor Morcillo en diálogo con ACNoticias. Frente a un año donde los argentinos esperan un rebote de la actividad económica, “el gran desafío es recuperar el poder adquisitivo del salario”, aseguró el titular del sindicato de la Alimentación.
Conduce en Córdoba el Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA). Su proyección nacional se traduce en que ocupa también la Secretaría General de la Federación Trabajadores de Industrias de la Alimentación (FTIA). Frente a un año donde se espera una reactivación, Morcillo dejó sentada su posición en cuanto a que la recuperación de los salarios será el gran motor de la economía. Y que ajustarlos solo por el índice de inflación no es otra cosa que apostar a un congelamiento de los ingresos, cuando no una paulatina caída.
ACNoticias: ¿Cómo resultó la paritaria de 2020 para el gremio de la alimentación?
H.M.: La negociación fue conflictiva, muy dura. A nivel nacional cerramos siete convenios. En el más grande, que contempla la actividad principal, la industria vinculada a la elaboración de alimentos, cerramos en un 32 por ciento para el periodo mayo 2020/abril 2021; tenemos una cláusula de revisión en el mes de marzo, según la evolución de los precios, es probable que debamos revisarlo.
ACNoticias: Algunos naturalizan, y consideran un éxito, lograr “empardar la inflación”…
H.M.: El gran desafío es recuperar el poder adquisitivo del salario. Si se toman los asalariados del país, los registrados, la pérdida del salario en los últimos años, en el periodo de (Mauricio) Macri fundamentalmente, en términos reales está en el orden del 30 por ciento. A pesar de que la mayoría de los gremios acompañó la inflación, hay una pérdida del poder adquisitivo real. Eso es producto no solo de la inflación, sino también de la devaluación del dólar. En nuestra actividad, los salarios estaban en promedio en alrededor de los 1.300 o 1.400 dólares y hoy no llegamos a los 400. Este año y el anterior, el desafío fue acompañar la inflación; algunos lo logramos y otros, la mayoría, no. Y no fue por otra cosa que por el contexto de crisis y la pandemia terrible que vivimos. El desafío para 2021 es ver cómo nos paramos frente al rebote económico que se espera; porque más bajo no podemos caer, salvo que la pandemia complique nuevamente todo. Pero considero que la llegada de la vacuna es una gran esperanza. Entonces, ahí vendrá una reactivación económica que provocará una puja distributiva muy grande, porque la idea es ganarle en 3 o 4 puntos a la inflación en los próximos años, que permita recuperar capacidad real de compra del salario.
ACNoticias: ¿Ahí se explica el planteo de la oposición a la “nueva movilidad jubilatoria”, cuestionada porque no contemplaba la inflación?
H.M.: Justamente, porque la idea es ganarle a la inflación, si no los jubilados, como nosotros, perderán. Como el ajuste a los jubilados tendrá un 50 por ciento por los ingresos tributarios y el otro 50 por los salarios, en un proceso de crecimiento de la economía es mucho mejor la fórmula propuesta por el Gobierno que seguir acompañando la inflación, porque así seguimos perdiendo salario real. La inflación solo acompaña ciertos niveles en el poder de compra, pero como es un promedio de muchas actividades, cuando vemos la composición de la canasta de los jubilados, donde los medicamentos es lo que más impacta, pierden. El Gobierno ha tenido políticas activas en esto, buscando garantizar a los jubilados los medicamentos. Lo que viene, y el Gobierno lo prevé, es una etapa de crecimiento económico; y el desafío sindical será ganarle a la inflación en tres o cuatro puntos y recuperar el poder adquisitivo perdido.
ACNoticias: Hace pocos días cerraron paritaria los aceiteros tras una huelga de tres semanas. ¿Considera a este cierre como una negociación “testigo” de cara al año que viene?
H.M.: Hay que ver todo el proceso, porque la paritaria de 2020 la cerraron en 35 por ciento, más o menos equilibrando la inflación. Abre una perspectiva para 2021, en una de las actividades más rentables de la Argentina de hoy, noventa por ciento exportadora, con un conglomerado muy fuerte en la zona de San Lorenzo (Santa Fe) y esa zona portuaria. Deja un antecedente bueno. Ahora, cuando vemos la cantidad de días de conflicto… La ventaja lograda es que pusieron un 25 por ciento para el año que viene, cobran por adelantado la inflación futura, aunque considero que la inflación será mayor en 2021. Presenta, sin duda, buenas perspectivas. Pero el desafío para el año que viene, para todos, será siempre ganarle a la inflación.
ACNoticias: O sea que más allá de las perspectivas favorables, también muestra lo duro que será la puja distributiva.
H.M.: Por supuesto, será duro.En mi sindicato venimos en los últimos años casi empatados con la inflación, pero con conflictos muy calientes. Por ahí no trascienden nuestras luchas, se hace foco en otras de mayor impacto. Si nosotros dejamos de fabricar galletitas y caramelos, no le importa demasiado a nadie. Pero en 2020, para cerrar por el 32 por ciento como comenté, tuvimos conflictos muy duros, de alto desgaste, con paros y movilizaciones, hasta caravanas a Buenos Aires. Sin duda el camino es la lucha, porque ante el mínimo crecimiento que se presente, las empresas van a tratar de recuperar la rentabilidad que perdieron este año y en los años de Macri y van a ser muy mezquinas a la hora de ajustar salarios. Avizoro un año de conflictos. Los aceiteros marcaron un camino pero, claro, fue durísimo. Hablamos de un sector agroexportador muy concentrado, de los que mejor les va. Así y todo, les costó muchísimo.
ACNoticias: El Gobierno Nacional parece entender que recuperar salarios es crucial para la reactivación. Lo sostuvo hace pocos días, en La Plata, la Vicepresidenta…
H.M.: Cristina (Fernández de Kirchner) la tiene muy clara cuando dice que los salarios le tienen que ganar a la inflación. Si no, no habrá recuperación. Cuando se acompaña la inflación, los sectores dominantes, los formadores de precios, ponen a un nivel la economía. Si el salario solo acompaña ese proceso inflacionario, las grandes empresas, hasta las Pymes, incrementan sus ganancias y el salario va perdiendo su capacidad de compra. Podemos acompañar la inflación, pero ¿cuántos kilos de carne compramos hoy y cuantos comprábamos hace dos años? Acompañamos la inflación, pero perdimos la capacidad de compra. En el proceso de Néstor Kirchner, desde 2004 y hasta 2011 por lo menos, el dinamizador del mercado interno, y lo que le dio mayor oxígeno a la economía, fue el crecimiento de los salarios; la mayoría de los gremios tuvimos paritarias por encima de la inflación. Después los salarios pasaron a empardar a la inflación y en la época de Macri cayeron estrepitosamente, incluso respecto a la inflación. El gran desafío, entonces, será ganarle a la inflación en 2021.
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