Medio ambiente y sustentabilidad
La minera acorralada en su propio territorio
El 31 de julio parte del vecindario de Sierras Chicas marchó para exigir un plan de manejo urgente de la Reserva Villa Allende. Y que se vaya la minera “El gran ombú”, algo difícil, pero no imposible. Mientras tanto, desde Ambiente del municipio, presentaron nuevo guardamonte y acciones para impedir vandalismo.
Por Redacción La Unión Regional • 14/08/2021 12:00 • Tiempo estimado de lectura: 5 minutos
La marcha por el “urgente” plan de manejo de la Reserva Hídrica, Recreativa y Natural de Villa Allende, tuvo un gran número de adherentes, incluso de oradores que a su turno pusieron énfasis en la necesidad de “participar, involucrarse y leer todos los trabajos que se vienen presentando con rigor científico y conocimiento profundo del territorio”. Al menos así se despachó el geógrafo y becario del CONICET Joaquín Deon, visiblemente molesto con algunas críticas que escuchó en relación a las consignas de la movida.
Y ahondó: “Si en lo discursivo se formuló un rechazo o que se vaya la cantera, ese rechazo va en dirección a que no tiene que avanzar más sobre la Reserva, y como no se puede expandir hacia la zona serrana porque está la Reserva, tampoco al este porque está la ciudad, o al norte donde están las especulaciones inmobiliarias, no les queda otra que hacer un cierre de mina e irse a otro lado, cosa que difícilmente hagan y por eso quieren explotar, quedando como sacrificio la zona de San Fernando, buscando habilitar otras canteras en esa zona”, como la de Puesto de Funes, en pleno bosque nativo.
Para Deon tiene que quedar claro el compromiso y la responsabilidad del Gobierno local de no especular con más nada y poner en valor la ordenanza municipal ya votada y aprobada. Ergo, que se active un plan de manejo a la brevedad y que sea cumplido y respetado.
Y continuó explicando para despejar dudas: “El único lado para el que se puede ampliar la cantera si no quiere meterse en la Reserva y respetar lo que dijeron allá por 2002, es hacia el basural, o la estancia La Reducción o los campos de la familia Cárdenas que junto a otro socio quieren hacer desarrollos inmobiliarios. Y después que se quede todo lo que quiera, eso sí, en vez de ser el tercer cráter de Argentina será el primero”.
El geógrafo también aludió a una gran cantidad de contrariedades que vuelven el asunto más complejo: “El fin que persiguen de explotar el predio de 46 hectáreas que compraron ya es una ley de ‘reserva y patrimonio’, por eso la etapa dos que quieren desarrollar ya entró dentro de la Reserva, fue autorizada con prefactibilidad por el ex intendente Héctor Colombo, pero más que nada por la Secretaría de Ambiente sin estudio de impacto ambiental. Sin embargo, hacia donde quieren expandirse es todo área de reserva refrendada por la ley provincial 9841 del IPLAM (Instituto de Planificación del área metropolitana), donde sí se escuchó el reclamo nuestro de respetar la Reserva. Pero ellos (los empresarios mineros) incorporaron el artículo 37, sólo en la provincia de Córdoba, que expresa que se puede hacer minería en las zonas rojas de bosque, que incluye a reservas hídricas y sitios patrimoniales, pero yo hago la salvedad que si son declarados como tal no pueden ser sujetos a cambio de uso de suelo en el espacio que se encuentran”.
Desde el municipio
En tanto, desde la Dirección de Ambiente municipal, su flamante titular Ing. Santiago Carmona (40), destacó que “venimos trabajando con una Mesa Ejecutiva conjunta entre Defensa Civil, dirección de Cultura y el área de Comunicación, preparando cartelería que en éstos días se colocará para prevenir incendios, informar y advertir sobre cuestiones de patrimonio, buscando impulsar más fuertemente el plan de manejo, invitando a los dueños de campos, la empresa minera, los consejos municipales de Ambiente y Cultura, los grupos de enduristas –que dicho sea de paso no pueden tener circuitos allí porque están prohibidos por ley–, y además de los esfuerzos vecinales o estatales, la cantera es el privado que tiene que proteger eso”.
Carmona, que hace apenas tres meses asumió el cargo, precisó que está dedicado de lleno al tema, y si bien admitió que “no tenemos potestad por asuntos legislativos, la etapa que explota la minera actualmente está fuera de la Reserva, pero las otras dos pretendidas están dentro, como el camino S-522 que es clave para el desarrollo de la cantera, pero que es público y de competencia provincial”, por lo cual exhortó a que la Provincia se involucre y allane las instancias de conflictividad.
Controles
En otro orden, Carmona (el primero de la izquierda en la foto de abajo) anunció la reciente incorporación de una guardamonte, Claudio Morero, cuya tarea inicial será patrullar en moto la Reserva, controlar el ingreso de camiones y camionetas para evitar volcamientos clandestinos, hacer relevamientos ambientales y prevenir incendios, tarea en la que se sumará Defensa Civil y Seguridad Ciudadana con la colocación de una oficina-contenedor en la bifurcación de los caminos a San Fernando y Pan de Azúcar para profundizar dichos controles.
El ingeniero industrial aprovechó el contacto con La Unión para deslizar que le gustaría que su Dirección se ponga sólida y se convierta en Secretaría o Subsecretaría dada la importancia que tiene el ambiente en la ciudad y el corredor.
Y entre otras cosas, señaló también que se avanza con la recolección diferenciada en barrios Golf, San Alfonso y Las Lomitas, que se colocaron 12 puntos verdes, se hicieron mejoras en la planta de transferencia y que hay mucho entusiasmo por el “bio nodo” de residuos verdes ubicado frente al cementerio Santa Inés, que ya está alambrado, y contará con chipeadoras, camas de compostaje (con y sin lombrices), vivero, huerta y un banco de leña social. Se está instalando el agua y la energía, y sobre un sector de sus dos hectáreas y media también se remediará un tramo que estaba abandonado, con parquización y mejoras.