Ciudadanos

El asociativismo en la Córdoba de 2021

Por Dr. Hugo Yagüe (*) • 21/05/2021 00:32 • Tiempo estimado de lectura: 4 minutos

(*) Delegado Territorial INAES en Córdoba-Responsable Región Centro de la Unidad de Vinculación de las Mesas del Asociativismo y Economía social (INAES)

Hacer eje en el concepto de asociativismo como modo de organización social en miras a un objetivo determinado, impone referirnos a sus múltiples representaciones formales, es decir, su aspecto jurídico, y por otra parte es necesario detallar la casuística determinada por la acción de esas unidades organizativas.

El Estado Argentino incluye en su estructura funcional, diversas áreas y delegaciones que auditan las condiciones reunidas por grupos informales de ciudadanes a los fines de otorgar la autorización para funcionar como persona jurídica y, posteriormente, fiscalizar la observancia de las normas que regulan la actividad de que se trate.

En esa arquitectura estatal, sobresale el INAES, Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Ministerio de Desarrollo Productivo) el cual, pese a originalmente estar orientado a las circunstancias derivadas de la matriculación y actividad/liquidación de Cooperativas y Mutuales, a partir del Gobierno del Presidente Alberto Fernández, decidió ampliar el rango de diálogo institucional con la comunidad, proponiendo la creación de Mesas del Asociativismo y la Economía Social.

En estos dispositivos, organizaciones de diversa tipología, (Fundaciones, Asociaciones, Centros Vecinales, Clubes de barrio, Cooperativas, Colegios, Universidades, Mutuales etc.) se congregan mediante determinadas normas de funcionamiento propuestas por el Estado, a elaborar proyectos, mapear necesidades, determinar existencias y faltantes en determinada comunidad a los efectos de generar sinergia, entramado y cooperación en la resolución de las demandas de esa localidad. La herramienta -que ya desarrolló, en el marco del año y meses de pandemia, unos 135 núcleos promotores a lo largo de todo el país[1]– se ha revelado como una eficaz instancia para potenciar el entramado entre actores comunales, promoviendo su independencia de los estamentos estatales, y favoreciendo el diálogo responsable en la administración de los recursos públicos, la mayoría de las veces generando los propios recursos a partir de la combinación de las distintas experiencias existentes

en los territorios que -adecuadamente entramadas- suelen resolver, en mayor o menor medida, necesidades y demandas sociales, sin la intervención directa del Estado.

En nuestra Córdoba, funciona una docena de núcleos promotores de las Mesas del Asociativismo y la Economía Social, habiendo logrado una importante interacción entre las entidades nucleadas en cada unidad y con las restantes expresiones del fenómeno.

Por otro lado, es palmario el desarrollo del sector cooperativo y mutual en nuestra Provincia, que tradicionalmente ha suplido la desidia del mercado de capitales y la insuficiencia de las políticas Estatales en la satisfacción de las demandas populares, particularmente allí donde el eje de la rentabilidad es más difuso.

Con el centro de su mirada estratégica puesta en el ser humano y en la solidaridad, Federaciones Mutuales y Cooperativas (Femucor-Fecescor-Ificotra-Fecarvic-Face, entre otras) han cristalizado ámbitos colectivos que potencian la tradicional movilidad operativa de las entidades que las integran.

Córdoba posee un verdadero ejemplo de la potencialidad impulsora para el desarrollo local que tiene el asociativismo, en la localidad de Devoto. Allí, el conglomerado cooperativo y mutual desarrolla actividades en las que está involucrado un tercio de la población total de esa ciudad[2].

El rol redistributivo que juegan las cooperativas y mutuales en su rol de comercializadoras de los productos de la economía social y otros más convencionales, es un eje central en la batalla contra la inflación.

Así, un reciente relevamiento de Colsecor[3], reveló que los precios al consumidor más bajos del país se encuentran en la localidad de Villa Santa Rosa de Río Primero, y esto se explica a partir de la acción de las mutuales de proveeduría, y su enfoque puesto en la accesibilidad de los artículos a la gran masa social, antes que en el margen de utilidad.

Asimismo, el complejo Cooperativo-Mutual ha erigido estructuras financieras que posibilitan el auxilio económico con recursos propios a entidades asociadas, dentro de las regulaciones legales y fiscales.

Por otro costado, el Estado Provincial dispone diversas áreas a los fines de atender la demanda asociativa, tales como: la Subsecretaría de Cooperativas y Mutuales, dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Minería, la Dirección de Inspección de Personas Jurídicas, vinculada a Fundaciones y Asociaciones Civiles. 

Se agregan a esta lista las dependencias municipales de la mayoría de las localidades Cordobesas que atienden la materia asociativa.

La Economía Social y su marco conceptual y orgánico el Asociativismo, han constituido en vastas áreas de nuestra Provincia verdaderos oasis para soliviar la crisis fenomenal provocada en la economía nacional por el gobierno neoliberal y la situación sanitaria global. La articulación, la promoción de estructuras organizativas interrelacionadas, es una semilla que fue echada al viento hace mucho tiempo y fue cultivada con laborioso cuidado por actores político-sociales. En la actualidad, esa labor se encuentra ante el desafío de lograr ser reconocida por el Estado como lo que es: Un motor clave del desarrollo social y productivo.


[1] https://www.argentina.gob.ar/inaes/mesas/bitacora

[2] https://www.economiasolidaria.com.ar/grupo-cooperativo-mutual-devoto-una-experiencia-extraordinaria/

[3] https://www.lavoz.com.ar/politica/inflacion-localidad-con-precios-mas-bajos-del-pais-esta-en-cordoba/