Medio ambiente y sustentabilidad
Asamblea Paravachasca: en contra de la licitación del saqueo
Desde el encuentro de vecinos y vecinas denunciaron que las obras provocarán un daño irreversible en el territorio.
En el comunicado de la Asamblea Paravachasca, denunciaron que el Gobierno de la Provincia de Córdoba publicó el llamado a licitación pública «para iniciar con la ilegal e ilegítima obra de la Autovía de la Ruta 5 de Paravachasca«.
Sostienen que sin Licencia Social, sin un Estudio de Impacto Ambiental convincente, sin posibilidad de dialogar con la provincia y con el rechazo de la obra por parte del 90% de quienes participaron en la Audiencia Pública Digital, los vecinos y vecinas de la zona se organizaron para impedir el avance de este proyecto, que atenta contra el ambiente y la población.
«Este proyecto nos costará más de 6000 millones de pesos -sin incluir el costo de las expropiaciones-, se realizará con fondos públicos y generará daños e impactos irreversibles en el territorio», indican en su comunicado y denuncian una desinformación sistemática desde las instituciones.
«Hace meses que vecinas y vecinos de este Valle venimos visibilizando y denunciando que esta obra va a fragmentar social, cultural, ambiental e hidrológicamente a Paravachasca. Hace meses también que realizamos presentaciones y pedidos de información en los municipios y comunas locales, en la Secretaría de Ambiente, en la Legislatura provincial y en la Justicia de Córdoba. Aún conociendo el derecho de acceso a la información pública y a las respuestas en los términos que establece el marco legal por parte de las instituciones estatales, ningún organismo respondió, nadie nos escuchó», señalan.
También señalaron que el Valle tiene otras prioridades: salud, agua potable, educación, tratamiento de residuos, sistema de cloacas, entre otras. «Todas problemáticas de larga data que se profundizará con la realización de esta obra».
«Se intensifican los proyectos mineros buscando avanzar, no sólo sobre lo ya destruido, sino también en áreas de conservación del bosque nativo, en las cuencas hídricas y en territorios frecuentemente incendiados; la frontera agroganadera se expande sobre zonas de conservación de monte nativo, estalla la especulación inmobiliaria sin ningún tipo de ordenamiento ni control estatal, se profundiza la falta de acceso al agua y aumenta exponencialmente la proliferación de basurales», denunciaron.