Derechos Humanos
«Quienes instigaron el golpe» no fueron juzgados
Por Redacción ACN • 25/03/2021 00:02 • Tiempo estimado de lectura: 3 minutos
El discurso de Cristina Fernández trazó un recorrido histórico desde marzo del 76 hasta el presente.
La inauguración del «Espacio para la memoria y la promoción de los DDHH» en la ex Brigada de Investigaciones de la localidad de Las Flores en provincia de Buenos Aires, fue la ocasión para escuchar los discursos del gobernador Axel Kiciloff y la vice presidenta Cristina Fernández. En ambos casos, las palabras no sólo fueron de recordación y homenaje a las víctimas de la dictadura, sino que evidenciaron el rumbo que pretenden tenga el gobierno hacia adelante.
La presidenta del Senado de la Nación comenzó recordando su primera visita a la localidad junto a Néstor Kirchner, apenas unos días antes del golpe de estado del 76. «La segunda vez que estuve aquí vine como presidenta» en agosto de 2011. «Vine a entregar un préstamo del bicentenario» a una empresa que hasta el 2008 importaba y que a partir de ahí había empezado a fabricar en el país.
Cristina describió las medidas económicas y el desarrollo alcanzado durante sus gobiernos y el de Néstor como lo opuesto a los objetivos que tuvieron quienes encabezaron la dictadura. «Fue tal el dolor que produjeron con las muertes, con las torturas, con los exilios, con las desapariciones, que tal vez no pasa tan advertido lo que habían venido a hacer y que necesitaron de la desaparición, de la tortura, de la cárcel, del exilio para imponer un modelo económico.»
«El drama, la tragedia de las madres, de las abuelas, de los hijos, de los nietos -siguió diciendo la vice presidenta-, colocó el foco internacional naturalmente en la violación de los derechos humanos los secuestros, las torturas, las desapariciones y las muertes. Pero realmente lo que se modificó en la Argentina fue una matriz de producción económica y fundamentalmente un sentido común de los argentinos y argentinas.»
«lo que se modificó en la Argentina fue una matriz de producción económica»
En otro tramo de su discurso, planteó que los juicios han servido para juzgar y condenar a los responsables de las violaciones a los derechos humanos, pero que quienes instigaron el golpe y se enriquecieron directamente con las medidas económicas que la dictadura tomó no les pasó nada.
En la continuidad de su cronología, enumeró la deuda que dejó la dictadura y la que generó el gobierno de Macri, así como el dato aportado por el Banco Mundial que entre 2002 y 2011 se había duplicado la clase media argentina.
En una clara alusión a las gestiones que se llevan adelante para la renegociación de la deuda externa expresó que EEUU es hora que nos haga un gesto, «porque entre que bancaron el golpe del 24 de marzo, bancaron a los ingleses en la guerra de Malvinas y fueron centrales a la hora que el FMI violara todos los artículos de su estatuto» para darle a Macri un préstamos sin precedentes.
Sobre el final planteó que «tenemos que reflexionar sobre la necesidad imperiosa de volver a adoptar un modelo de producción y trabajo», más allá de los posicionamientos políticos que se tenga.
«Hay que mantener viva la llama de estas luchas»
Lo expresó el gobernador de Buenos Aires Axel Kiciloff en el discurso que precedió a la ex presidenta de la Nación. Sus palabras estuvieron siempre en la búsqueda de vincular la lucha histórica de los organismos de derechos humanos con lo que corresponde hacer para actualizarla.
Cómo hacer para que la lucha de «Madres, Abuelas, HIJOS no sea algo fosilizado y del pasado o una reivindicación histórica que vaya quedando vieja?», se preguntaba, «actualizándola, cada acto de gobierno o de la militancia tiene que servir a las mayorías populares. En cada decisión, cada minuto, cada día, hay que mantener viva la llama de la memoria».