Córdoba independiente
Una novela con paisaje andino y con la fuerza de la magia ancestral
Por Mauricio Micheloud • 12/01/2021 14:00 • Tiempo estimado de lectura: 2 minutos
Lucía adora las ballenas, Joaco solo piensa en el fútbol, Nacho prefiere los laberintos, Pancho se la pasa con los videojuegos y Laura es fanática de “Los juegos del hambre”. Estos son los sueños que los impulsan día a día y que hacen de cada niñe un mundo.
Pero hay que tener cuidado y no dar por sentado que los sueños solo pertenecen a uno mismo, eso que se cree que es tan firme puede cambiar en cualquier momento. La tierra se mueve, no siempre estamos conscientes pero gira, viaja, nunca se queda quieta. La tierra también acomoda sus placas y retumba. La tierra se sacude, capáz que para decirnos que está ahí: presente. Un simple movimiento lo cambia todo para bien o para mal. Un sismo puede enredar esos sueños que parecían tan arraigados y el mundo se pone patas para arriba. Entonces el sueño que era de una ahora es de otro y este ahora es de aquel y todo se vuelve confuso, todo se enrarece. Pero los héroes siempre emprenden un viaje en busca de respuestas porque aunque estas estén en frente de ellos no siempre es tan evidente. Hay fuerzas que se desconocen y actúan, no hablan el mismo idioma salvo que estemos dispuestos a escuchar atentamente. Hay que prestar mucha atención y ser paciente, ahí reside la magia. A los sueños hay que atraparlos porque les gusta volar. Los de Lucía, Joaco, Nacho, Pancho y Laura son así, así son los sueños de les niñes, no hay fuerza que los pare.
Detalles de edición:
- El libro viene en una bolsita con un aro de madera e instrucciones para armar un atrapasueños.
Sueños Enredados
María Martha Paz y Ana Paula Lubeti
Ediciones de la Grieta
9789873815454
120 páginas
21 x 15 cm
